La Habana.- EL PRIMER laboratorio del país para la evaluación del sistema nervioso autónomo fue inaugurado hoy en el Centro de Investigaciones del Deporte Cubano (CIDC).
El doctor Jorge Pável Pino, director de esa institución, cortó la cinta de apertura, acompañado por el coronel Bárbaro Socarrás, jefe del proyecto de la empresa Grito de Baire, la cual fabrica equipos para la exploración médica en aviación y actividades subacuáticas (Emplomas).
Este nuevo laboratorio fue concebido de conjunto con el CIDC para tratar a pacientes relacionados con la actividad física, enfermos y deportistas supuestamente sanos.
Pino explicó la importancia de este aporte de la ciencia en favor del deporte cubano y se refirió a la preparación para estos fines de la doctora Cesia Rivera Garmendía y el licenciado Fidel Castro Batista.
Ambos señalaron cómo este tipo de estudios neurológico tiene un valor pronóstico ya sea para enfermos o en el caso de los deportistas, que son supuestamente sanos.
«El sistema nervioso autónomo rige todo en el cuerpo, las emociones, y de hecho los músculos, específicamente en el deporte se harán mediciones que demuestren la capacidad de los atletas de controlar las emociones para soportar cargas de entrenamiento», comentó Castro Batista.
Agregó que «también es muy importante para el estudio de atletas con mucho talento y buen rendimiento en el entrenamiento, pero que no cumplen las expectativas en las competencias».
La prueba está diseñada para hacer diferentes maniobras como medir la presión arterial del atleta y, según la variabilidad de su frecuencia cardiaca, si los datos arrojan alteraciones en el sistema nervioso autónomo (disautonomía), indagar sobre problemas orgánicos, independientemente de lo sicológico.
«Servirá de mucho para la preparación del atleta porque al ser del conocimiento del entrenador lo tendrá en cuenta tanto para las etapas de preparación como para sus reacciones bajo la presión de una competencia, donde puede bajar su rendimiento», detalló el joven licenciado.
Detectar estos problemas en el sistema nervioso autónomo y mucho más en edades tempranas, pueden ayudar a los atletas a modificar su actitud, en tanto sea capaz de adaptarse a los momentos de tensión, y el entrenador de trabajar mentalmente en ese sentido, especialmente con deportistas con sobrado talento.
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