La Habana.- UN NOVENO puesto fue la cosecha de la cubana Rose Mary Almanza este viernes, luego de completar 1:58.51 minutos en los 800 metros en el Mitin Internacional de Atletismo Herculis EBS, sexta parada de la Liga del Diamante Wanda, ganada por la británica Laura Muir con registro personal de 1:56.73.

Almanza no hizo una carrera inteligente en la que fue su cuarta presentación internacional de la temporada. Corrió a un ritmo demasiado intenso durante los primeros 400 metros, guiada por su compañera Sahyli Diago –en función de “liebre”-, y eso quizás afectó su segunda mitad del recorrido.

Lo cierto es que la campeona centrocaribeña de Barranquilla 2018 no se mostró igual que en sus anteriores compromisos, y seguramente sacará experiencias de una prueba en la que abundaron las marcas personales y puede tomarse como adelanto de lo que sucederá en los Juegos Olímpicos de Tokio.

En la capital nipona volverá a encontrar a varias de las sus rivales ahora, entre ellas quienes completaron el podio: la también británica Jemma Reekie (1:56.95/marca personal) y la estadounidense Kate Grace (1:57.20/marca personal).

Almanza ganó en la fase de Estocolmo, el pasado día 4, con tiempo de 1:56.28 minutos. Este crono clasifica como el segundo mejor del actual ranking y tendrá que acercarse a eso en la capital nipona para cumplir el sueño de llegar a una final con premios.

También se corrieron con fuerza los 1500 para mujeres, en los que la campeona olímpica de Kenia, Faith Kipyegon, dominó con 3:51.07 minutos, el cuarto mejor registro de todos los tiempos, además récord nacional y por supuesto tope del escalafón del año.

La neerlandesa Sifan Hassan, una de las que quiere disputarle el reinado en Tokio, entró detrás con 3:53.60, escoltada por la etíope Freweyni Hailu (3:56.28/marca personal).

El noruego Karsten Warholm, reciente recordista del orbe en los 400 metros con vallas, sigue sumando méritos y esta vez se impuso con tiempo de 47.08 segundos, plusmarca para la competencia.

La polémica regla The Final 3, utilizada para definir esta temporada a los campeones en los saltos horizontales y los lanzamientos, dejó ahora sin el premio principal a la triplista venezolana Yulimar Rojas, pese a ser la única en el evento con salto de más de 15 metros.

Yulimar llegó hasta los 15.12 metros en su segundo intento, pero luego en el sexto y último –que es el que define a la ganadora– cometió falta y la victoria se la adjudicó la jamaicana Shanieka Ricketts, quien se despidió con solo 14.29.

La cubana Liadagmis Povea estuvo anunciada para esa prueba, pero dificultades con su vuelo impidieron la llegada a tiempo al principado.

Tampoco se presentó en la longitud Juan Miguel Echevarría, quien por decisión técnica no competirán más hasta la cita olímpica.

«Tenía previsto desde el principio dos competencias y ya las hicimos en Castellón y el Diamante de Estocolmo. Él está en muy buena forma y seguiremos cumpliendo lo planificado hasta Tokio. Podíamos estar ahora, pero de conjunto tomamos la determinación», conversó con JIT el preparador Daniel Osorio.

Por cierto, la longitud fue otro de los ejemplos de la injusta y polémica regla, pues el jamaicano campeón del orbe Tajay Gayle quedó segundo, a pesar de que su salto previo de 8.29 metros era mejor que  el 8.24 registrado por el griego Miltiadis Tentoglou en su último intento.