La Habana.- LAS DELEGACIONES cubanas que asistirán a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024 recibieron hoy la enseña nacional de manos del Primer Secretario del Partido y Presidente de la República de Cuba Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
En la base del monumento a José Martí, en la Plaza de la Revolución, el luchador Mijaín López y los paratletas Omara Durand y Robiel Yankiel Sol tuvieron el privilegio de sostener la bandera en nombre de sus compañeros, como parte de una ceremonia histórica por la unión de quienes asistirán a ambas justas multideportivas.
El simbólico momento se completó con la imagen de Idalys Ortiz recibiendo el pabellón de manos de Otto Vaillant, embajador de Cuba en Francia, donde la líder del equipo de judo completará su preparación para el certamen que comienza el próximo día 26.
Al leer el compromiso en nombre de los miembros de las dos delegaciones, el titular olímpico del estilo clásico Luis Alberto Orta ratificó la voluntad de ser fieles al legado de Fidel y representar con gallardía los valores del pueblo en el que se han formado y ser exponentes del juego limpio.
«Derrochar dignidad y entrega total, en consecuencia con el privilegio que constituye defender la bandera de la estrella solitaria, para que otra vez la Patria nos contemple orgullosa», agregó Orta en un escenario icónico en el que los deportistas cubanos han confirmado su fidelidad a la Patria y la Revolución.
Allí, el luchador Gabriel Rosillo y el paratleta Ulicer Aguilera, ambos medallistas mundiales, colocaron una ofrenda floral en homenaje al Apóstol.
Exponentes de la lucha grecorromana, natación, tiro con arco, atletismo y levantamiento de pesas formaron parte de la representación olímpica que tendrá acción en la Ciudad de la Luz hasta el 11 de agosto.
El acto fue propicio además para que el Presidente Díaz-Canel entregara a Omara y Mijaín la Orden al Mérito Deportivo, por sus incuestionables aportes al deporte en Cuba.
Manuel Marrero Cruz, Primer Ministro de la República; Jorge Luis Perdomo Di-Lella, viceprimer ministro; Osvaldo Vento Montiller y Roberto León Richards, titulares del Inder y el Comité Olímpico Cubano, respectivamente, también estuvieron presentes.
«Al abanderarlos les pedimos que luchen por lograr que nuestro país esté entre las potencias olímpicas y paralímpicas. Sobreponiéndonos a la crueldad de un injusto bloqueo yanqui que no hace distinción ni con una esfera tan sensible y noble como el deporte», les instó Perdomo Di-Lella.
«Compitan con alegría, disfruten la fiesta que significan estas citas, defiendan cada medalla para que en esos escenarios en Francia ondee la bandera que tantas veces han honrado Mijaín, Idalys, Julio César, Omara, Pupo, Arlen, Cirilo, Leyanis... y otros que han luchado hasta el último momento», dijo en referencia al prestigio y los éxitos cosechados por la Isla en este tipo de justas.
«El honor vale más que la vida, expresó Fidel. Compitamos con honor, tengamos la voluntad inquebrantable de vencer como el mejor regalo para nuestro aguerrido pueblo. Los esperaremos victoriosos de regreso en la Patria, ¡Hasta la Victoria Siempre!», agregó ante los presentes, entre ellos 17 clasificados hasta el momento a la lid paralímpica.
Glorias como la campeona de la jabalina en Moscú 1980, María Caridad Colón, y el primer medallista bajo los cinco aros después del triunfo de la Revolución, el corredor Enrique Figuerola, participaron en la ceremonia, que contó también con la presencia del embajador de Francia en Cuba, Laurent Burin Des Roziers.
Christopher Simpson junto a su banda Elevación regalaron una versión en vivo del tema Tiempo de Vencer, que acompañará cada actuación de las delegaciones como himno de inspiración.
c/
|